miércoles, 5 de marzo de 2014

SÓLO 1 SEGUNDO, MIÉRCOLES


SÓLO 1 SEGUNDO


"Durante los años de m juventud me torturé cavilando sobre si tenía o no vocación y sobre si, de tenerla, cual podía ser. La vocación, en sentido estricto, sin embargo, no es algo que se tenga; es más bien ella la que nos sostiene a nosotros. No es posible saber qué quiere Dios de cada uno sólo mirando hacia atrás, sino sobre todo mirando hacia adelante: la propia vocación, en rigor, sólo se conoce al término de nuestra biografía. Al comienzo sólo hay un germen que puede adquirir las formas más diversas, una semilla que puede abortarse o propsperar. Todos suelen tener una idea retrospectiva de la vocación; pero lo cierto es que la llamada de Dios no está tanto en el pasado como en el porvenir"

(P. D'Ors, El olvido si, Valencia, 2007, p.99)