viernes, 21 de febrero de 2014

SÓLO UN SEGUNDO, VIERNES


SÓLO 1 SEGUNDO



"Concluido el trabajo, o mientras lo realizaba, percibía que en el desierto todo parecía proclamar la grandeza del Creador. ¿Cómo podría entonces no creer?. Todavía me lo pregunto. A través de aquella naturaleza esplendorosa, Dios comenzaba a abrir mi corazón para la fe. La fe nace de la contemplación de las maravillas del mundo: pero hay que ser un indigente para percibirlo; hay que haber salido de la propia tierra; hay que haberse atrevido a estar completamente solo, que es cuando Dios se muestra como la más dulce de las compañías"

(P. D'Ors, El olvido si, Valencia, 2007, p.73)